Trivial la lluvia que incesante cae de los altos cielos,
si poseo al sol en mi interior.
Un sol propio que me ilumina,
un sol que me calienta,
un sol que me alimenta, y que me llena de vida.
Tú eres el sol semillita nuestra.
Irradia tu luz desde dentro mientras yo te espero aquí afuera
soñando con el sonido de tu risa,
ansiando contemplar el brillo de tus ojos,
deseando la dulzura de tus besos.